Fiel a sus fines fundacionales y como cauce conductor de la santificación de todos sus miembros, la Hermandad de la Santa Vera-Cruz, tiene como finalidad primordial, vivir una auténtica comunión de fe, de caridad y de culto.
Para ello durante cada ejercicio, celebramos una serie de cultos establecidos en nuestras Reglas en honor a nuestros Amantísimos Titulares, recogiendo y actualizando el legado histórico de la religiosidad popular que constituye su fundamento básico, fomentando principalmente en ellos la difusión de la Palabra de Dios así como la práctica de los sacramentos de la Penitencia y de la Comunión, procurando la participación activa de los hermanos en el desarrollo de dichos cultos.
Así, la Diputación de Liturgia tiene como misión velar para que los cultos marcados por las Santas Reglas, se revistan de toda la solemnidad y cuidado que se requiere, para dar Gloria a Dios y para el provecho espiritual de los hermanos.
El culto litúrgico, participando del sacerdocio de Cristo, ha de ser una vivencia singular de la vida de fe y de oración. Los hermanos harán de su vida un culto espiritual, ofreciéndose al Padre en justicia y caridad, y procurarán siempre una participación plena, consciente y activa en la vida litúrgica, la cual supone vida de oración. La participación en la Eucaristía constituirá el centro de su vida cristiana.
Unidos como hermanos, celebramos la Eucaristía, la que nos une, la que nos perdona, la que nos envía como hombres y mujeres nuevos, llenos del amor de Dios vivo. En este empeño por convertir la Eucaristía en centro de nuestra vida de Fe, animamos a los hermanos a compartir los Cultos y misas que celebra nuestra Hermandad.
Son muchas las ocasiones que nuestra Hermandad nos ofrece la oportunidad de encontrarnos con el misterio Eucarístico. En exposición del Santísimo, misas, Quinarios, Vía Crucis, Triduos o Funciones a nuestros Amantísimos Titulares. Ven y vive la Eucaristía.
Fiel a sus fines fundacionales y como cauce conductor de la santificación de todos sus miembros, la Hermandad de la Santa Vera-Cruz, tiene como finalidad primordial, vivir una auténtica comunión de fe, de caridad y de culto.
Para ello durante cada ejercicio, celebramos una serie de cultos establecidos en nuestras Reglas en honor a nuestros Amantísimos Titulares, recogiendo y actualizando el legado histórico de la religiosidad popular que constituye su fundamento básico, fomentando principalmente en ellos la difusión de la Palabra de Dios así como la práctica de los sacramentos de la Penitencia y de la Comunión, procurando la participación activa de los hermanos en el desarrollo de dichos cultos.
Así, la Diputación de Liturgia tiene como misión velar para que los cultos marcados por las Santas Reglas, se revistan de toda la solemnidad y cuidado que se requiere, para dar Gloria a Dios y para el provecho espiritual de los hermanos.
El culto litúrgico, participando del sacerdocio de Cristo, ha de ser una vivencia singular de la vida de fe y de oración. Los hermanos harán de su vida un culto espiritual, ofreciéndose al Padre en justicia y caridad, y procurarán siempre una participación plena, consciente y activa en la vida litúrgica, la cual supone vida de oración. La participación en la Eucaristía constituirá el centro de su vida cristiana.
Unidos como hermanos, celebramos la Eucaristía, la que nos une, la que nos perdona, la que nos envía como hombres y mujeres nuevos, llenos del amor de Dios vivo. En este empeño por convertir la Eucaristía en centro de nuestra vida de Fe, animamos a los hermanos a compartir los Cultos y misas que celebra nuestra Hermandad.
Son muchas las ocasiones que nuestra Hermandad nos ofrece la oportunidad de encontrarnos con el misterio Eucarístico. En exposición del Santísimo, misas, Quinarios, Vía Crucis, Triduos o Funciones a nuestros Amantísimos Titulares. Ven y vive la Eucaristía.
Unidos como hermanos, celebramos la Eucaristía, la que nos une, la que nos perdona, la que nos envía como hombres y mujeres nuevos, llenos del amor de Dios vivo. En este empeño por convertir la Eucaristía en centro de nuestra vida de Fe, animamos a los hermanos a compartir los Cultos y misas que celebra nuestra Hermandad.
Son muchas las ocasiones que nuestra Hermandad nos ofrece la oportunidad de encontrarnos con el misterio Eucarístico. En exposición del Santísimo, misas, Quinarios, Vía Crucis, Triduos o Funciones a nuestros Amantísimos Titulares. Ven y vive la Eucaristía.
“Es la obra y el don de Cristo presente allí que sale a nuestro encuentro y nos alimenta con su palabra y con su vida”.
Unidos como hermanos, celebramos la Eucaristía, la que nos une, la que nos perdona, la que nos envía como hombres y mujeres nuevos, llenos del amor de Dios vivo. En este empeño por convertir la Eucaristía en centro de nuestra vida de Fe, animamos a los hermanos a compartir los Cultos y misas que celebra nuestra Hermandad.
Son muchas las ocasiones que nuestra Hermandad nos ofrece la oportunidad de encontrarnos con el misterio Eucarístico. En exposición del Santísimo, misas, Quinarios, Vía Crucis, Triduos o Funciones a nuestros Amantísimos Titulares. Ven y vive la Eucaristía.
“Es la obra y el don de Cristo presente allí que sale a nuestro encuentro y nos alimenta con su palabra y con su vida”.
La participación ferviente en los cultos anuales en honor de los Titulares constituirá un grato deber de piedad cristiana y de fidelidad a los fines de la Hermandad. Igualmente se tendrá en gran estima la participación en jornadas de formación y espiritualidad.
Puedes ponerte en contacto con esta diputación a través del correo electrónico:
La participación ferviente en los cultos anuales en honor de los Titulares constituirá un grato deber de piedad cristiana y de fidelidad a los fines de la Hermandad. Igualmente se tendrá en gran estima la participación en jornadas de formación y espiritualidad.
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